A.A.

12 de febrero de 2010
Cabalgavientos

el ojo se pone triste, como la ausencia,
como la palabra pérdida y olvidada.
palabra de promesa vacía
de vacíos los espacios, los días, las almas y los bolsillos
así, flotando con las caras largas,
balbuceando migajas.
desperdigando como recuerdos
las ganas y los intentos de evadir las soledades,
pero son como tu segunda piel.

Deberías decirme adiós.

1 Comentarios:

Colorina dijo...

Con espasmos y mentiras
en mis noches sucias
pero libres del fin
con caminos cerrados
por grandes montañas
quizás solo sean dos...
pero las más grandes
el recóndito sentir
que llevo, lo llevo
hasta la muerte.
hasta el cambio mismo
de mi ser, lo llevo hasta
la linea curva de los sentidos atemorizados.
del tocino que día a día
comen los que están más
arriba de mí.
la asquerocidad misma de ellos
es mi puta realidad, y las sobras siempre me las trago yo.



MIS MAS CORDIALES SALUDOS SEÑOR PABLO VILLEGAS.